Buenas noches....Parte diario de los peregrinos granadinos.
Antes que nada anunciarles que nuestros Hobbits granadinos están mucho más recuperados. Ayer fue un día oscuro en su camino pero en esta jornada todo se ha desarrollado de forma más amena. Cierto es que desde luego deben de ser parientes de la Familia Adams, así parece al comprobar que ellos también se desplazan con la nube siempre encima de sus cabezas. De forma que en esta jornada su nube compañera ha decidido descargarles un poquito de nieve, bueno...más que un poquito digamos que ha les ha soltado nieve al por mayor. De ahí el título del post de hoy. Supongo y casi doy por hecho que para los avezados en el mundo de Tolkien no les habrá costado el más mínimo trabajo recordar el nombre de Caradhras. El difícil puerto que intentó atravesar la Compañia del Anillo y del que tuvo que desistir en su paso. Recuerden los Hobbits casi hundidos en la nieve, Gandalf haciendo fuego con su bastón y las tormentas cerrándoles el paso de la montaña para hacerles volver e intentar el paso por Moria.
Vale...no sigo que me conozco y paso de nuestros peregrinos y continúo con la historia del Anillo. De todas formas viene a cuento porque el Maestro en una de las fotos enviadas cataloga el escenario como el mismo Mordor, así que me ha valido para hilar en este tema. Como ya dije antes nuestros peregrinos están de mejor humor, más descansados y algo más recuperados. Han hecho fin de etapa en un pueblo llamado Fonfría del camino. Según explica el Barón, antes han hecho parada de fonda en otro lugar llamado Hospital. Parece que han comido bien ensalzando la calidad de las vituallas consumidas, claro que eso en sus circunstancias es fácil. Con el cansancio acumulado y el trote continuo que llevan la gazuza siempre está presente y cualquier provisión medianamente comestible se antoja como el mejor de los manjares. Pero bien, demos por bien juzgado la calidad del local.
Siguiendo la crónica según comenta el Barón, algo más tarde han llegado al puerto del pollo o en gallego Alto do poio -mola el gallego- donde ha surgido una de las anécdotas del día. Por decirlo de forma somera el Barón iba un poco ligero de estómago y en aquel lugar había un hostal. Como somos de educación castellanos viejos, el Baron, el Maestro y este su cronista siempre tienen reparos en entrar en cualquier local hostelero y pasar directamente al baño, de forma tal que el Barón le dijo al Maestro que le pidiera una manzanilla que no estuviera muy caliente, vamos con agua tibia. Dicho y hecho el Maestro solícito requirió la atención del buen posadero para que le sirviera la infusión haciéndole saber que la temperatura del agua no estuviera a los grados normales del infierno sino un poco más tibia. Pues parece que el buen mesonero les contestó con un desplante de...."aquí el agua de la manzanilla sale a la como tiene que salir...caliente y punto...¿Qué es eso de la manzanilla que no esté muy caliente?".
Doy por sentado que en aquel momento el Maestro de acordaría de la policía política -un cuerpo a crear en su momento...otro día les cuento- y desde luego que el mesonero quedará para los restos en la lista del Maestro y aquí en este blog como un petardo. Así que supongo que el Barón una vez aliviado del estómago tendría que gastar parte del fuelle destinado a caminar en soplarle al vaso de manzanilla hasta reducir la temperatura del mismo.
No puedo dejar de comentarles que mientras el Barón me contaba esto se escuchaba la voz plañidera del Maestro diciendo "esto es la ruina" -¿he dicho antes que estaban más animados...?jejeje- al igual que también les señalo la actitud infantilista del Barón cuando en otro momento de la conversación era el Maestro el que hablaba conmigo y al mismo tiempo reprendía al Barón por ponerse a dar saltos en su cama -la del Maestro..se entiende-. Signos todos estos que reflejan los daños cerebrales producidos en ambos hobbits peregrinos por la paliza que se están marcando. Espero que con un tratamiento intensivo de catacroquers, birritas y buen tapeo al menos podamos recuperar algo de su antiguo serio comportamiento.
Poco más que decir, indicarles que según como se comporte el clima decidirán la duración de la etapa, estando esta entre llegar a Calbor o hasta Sarriá, pero ya digo, dependiendo de la cantidad de nieve que aún le quede a la nube compañera de soltarles encima de sus cocorotas. Por supuesto se entiende que a falta de nieve, la señora nube puede marcarse hacerles crecer el pelo a nuestros peregrinos vertiéndoles en sus cabezotas buenos chuzos de punta o cantaros de agua, como prefieran.
Solo me resta saludar a las señoritas profesoras de Mallorca, compañeras de caminata de nuestros dos Hobbits, Antonia, Magdalena...Isabel?...me faltan más.En fin, a todas. Siento no recordar el nombre, mañana lo arreglo, pero en descargo alego que el señor Barón me dijo sus nombres a eso de las nueve de la noche, hace casi dos horas y mi neurona después de un día de trabajo, bastante entretenido hoy por cierto, no está para tantos trotes, teniendo en cuenta que también hay que redactar el parte que les escribo.
Poco más, se acerca ya el fin de semana, nuestros peregrinos están en el ecuador del camino y como siempre, mañana Dios mediante, más.
** supongo que sobra la aclaración, pero bien, como suponen las fotos son de los peregrinos y está claro que el tiempo no les acompaña. Pues que hubieran ido en "otobús" y no pasan tanto frío, tanta historia...para qué está el progreso, pues para aprovecharlo joder, autobús, automóvil, avión hasta Santiago, habitación de hotel full equipe -nada de albergues- y a disfrutar. Eso es hacer el Camino...jejeje.
Nada más..yo voy a hacer el camino hacia la cocina que aprieta el hambre a estas horas, un cenapio rápido para el chache.
Buenas noches.
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