lunes, diciembre 18, 2006

Condiciones idóneas.

Me encanta escribir de noche. Estando tranquilamente en mi habitación, con alguna música tranquila, preferentemente clásica, o sin ella, sin más luz que la del monitor –aunque no sé si esto es muy bueno- y la que penetra por la ventana, procedente de las farolas de la calle. No estoy capacitado para escribir de día. Supongo que la parte diurna está más enfocada al trabajo, a la rutina y a lo programado. También es verdad que por la noche es cuándo se dan las condiciones necesarias de tranquilidad, predisposición por mi parte y suficiente atmósfera creativa para hacerlo. Por decir una frase de esas que quedan bien, “la noche llama a los sentidos”. No sé de quién es la frase, es probable que la escuchara en algún anuncio, pero me gusta y he quedado muy bien al decirla.

No es fácil escribir, desde luego no me considero un escritor ni nada por el estilo, pero si es cierto que a mí también me pasa que necesitas inspiración para pergeñar cualquier parrafada que aunque pase fácilmente por la cabeza luego a la hora de plasmarla en papel, o en formato html...jjejejeje cuesta bastante trabajo el hacerlo. No es fácil y no siempre se tiene el poder de hacerlo.

Lo que si es cierto es que recomiendo a todo aquel que pueda a escribir, pero no a escribir para el mismo. Sino a escribir para que por lo menos una persona más lo lea. Es una actividad que relaja la mente una barbaridad y sobretodo y aún más importante creo que relaja hasta el alma. Espero que no lea esto Friker Jiménez porque igual dice que mi Blog está maldito, encantado o es un súcubo de brujos.

Yo soy el primero en reconocer que gusta y es muy placentero el saber que leen lo que escribes. No solo como chute de “ego”, que a veces viene bien y es necesario, sino también porque es una forma de exportar pensamiento, ideas y como no, de que nos rebatan estas ideas o pensamientos que hemos plasmado y que nos hemos arriesgado a someter al público al sacarlo de nuestra privacidad. No siempre es fácil encontrar un tema. Hay una cantidad extraordinaria de situaciones que instintivamente piensas –tengo que escribir sobre esto o aquello- pero que de la misma forma las olvidas, a no ser que se tenga la habilidad de apuntarlo para que no se olvide, facultad que por desgracia carezco de ella, con el consiguiente perjuicio para mi búsqueda de temas para escribir.

Se debería de fomentar el escribir. En las escuelas debería de ser unas de las actividades a las que más empeño los profesores debían dedicarle. No solo por el hecho de escribir para que otros te lean, sino simplemente como instrumento donde expresar y consiguientemente “desfogar” preocupaciones, estrés, temas delicados etc. El solo hecho de plasmar las opiniones, sentimientos etc., es un mecanismo soberbio de relajación mental. Pero claro, se lee menos, consecuentemente se escribe menos.

Yo en ese caso, por mi parte voy a seguir disfrutando de plasmar mis parrafadas mentales y de esta forma descansar la mente. Lo siento por quién no pueda o no conozca esta posibilidad. La verdad es que no sabe lo que se pierde.

1 comentario:

Lili dijo...

Diosa contenta. Diosa leyendo t.