domingo, diciembre 02, 2007


La maestra de Sudán.

Está claro que el pollo que se ha liado porque esta mujer le ha puesto a su gato de nombre Mahoma, está fuera de lugar se mire por donde se mira. Lo primero que hago es decir que esta mujer es tonta, porque a nadie se le ocurre en un país como Sudán ponerle ese nombre a un gato, estamos hablando de un país que pertenece a club de países del culo del mundo, encima ultrareligiosos, en este caso de la religión árabe o musulmana, con una ausencia de educación y cultura solo equiparable al fervoroso sentimiento religioso que profesan y desde luego no es el mejor sitio para hace estas gilipolleces.
Después de todo hay que estar dando las gracias porque solo la han castigado
con 15 días de cárcel y eso si...que salga disparada del país. Menos mal que esta vez la cosa no ha salido mal. Está claro que esto es una barbaridad, no es de recibo que por ponerle al gato el nombre de Mahoma se monte una cirio pascual de este tamaño, pero ese país le da mas importancia a los nombres de los gatos que a los nombres de los elementos de la tabla periódica -claro que también eso pasa ya en España...pero por otros cauces- . Seguramente habrá voces que piden que respetemos las costumbres de Sudán etc...Todos estos flipados/as de asociaciones tipo ong, partidos de tendencia izquierdista etc...Bien, para todos ellos una gran mierda pinchada en un palo. Qué coño de respetar costumbres, no se puede respetar la barbarie, ni en Sudán ni aquí ni en ninguna parte. Está claro que la forma de vida occidental ha veces se impone sin tener por qué y arramblando sin necesidad con otras costumbres, pero eso no tiene nada que ver con una situación como esta donde se pierde la compostura por un hecho tan nimio como ese.
Supongo que no gustará saber que hay un gato que se llama Mahoma como que así tampoco gusta una gato que se llame Jesús...o Cristo -y por qué no va a gustar digo yo- pero bueno, se respeta y punto. Se coge el gato en cuestión y se le desbautiza, se deja sin nombre, así, gato....a secas y luego se le pone un nombre más común con las costumbres del país...no sé Bin Laden, Ahmed...en fin como sea...o se le pone George Bush para dar por culillo.

Terminando de cachondeos ya, lo verdaderamente preocupante es la cantidad de gente que ha salido en los reportajes que han emitido sobre esta noticia, pues eso, la gente de ese país que aparece quemando la foto de la profesora, gritando pidiendo su lapidación etc...Uff que problema, eso solo le cura con educación y con años de trabajo continuo formando al pueblo, y para eso hacen falta generaciones. Que lástima la cantidad de gente que está más pendiente de los nombres que se les ponen a los gatos en su país que de remediar males como el paro, la incultura, la inasistencia médica, la corrupción, el respeto a las libertades -coño parezco Zapatero- y todas esas cosas que hacen de una sociedad un lugar, por lo menos...aceptable para vivir.

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