Este mediodía, al ir para casa a echar una comidita iba en el pánzer escuchando la radio. Radio 5 todo noticias de RNE. Cuando no tengo muchas ganas de música -Rock and gol- pues mejor la emisora de partes contínuos. Lo dicho, eran las dos menos diez o así, pues hay un espacio donde los escuchantes dejan sus dudas y preguntas. Algo así como lo que siempre quiso saber y nunca preguntó, pero claro en este caso si se pregunta. Al grano artista -me lo digo a mi mismo...- resulta que un oyente largó su cuestión sobre "qué es la temperatura en la sombra". A ver, cuando nos dicen las temperaturas en los partes meteorológicos, ya sean en radio, tv etc, las temperaturas siempre son a la sombra. Pues este curioso oyente versaba su duda sobre "en qué sombra se mide la temperatura". A la sombra de un edificio, en medio del campo, en un pinar..."¿Donde carajo se mide a la sombra?.
Yo pienso igual, porque a fin de cuentas no es igual la sombra de un pinar que la sombra de un edificio o de un muro de ladrillos dándole el sol. Sombras frescas o no, más húmedas o no. De acuerdo que eso no influye para la temperatura pero por otro lado y al hilo de esta cuestión yo añado al asunto...Y por qué tiene que ser medida la temperatura a la sombra. A ver, no siempre estamos a la sombra, también al sol -como el caracol...jejeje-. Bien es cierto que en verano y si vamos por la calle, especialmente en mi zona granadina buscamos la sombra como las lombrices la humedad...de igual forma que en pleno invierno la acera del sol está atestada de caminantes y la contraria donde "da la sombra" cuando menos sino vacía solo ocupada por aquellos que o bien van a entrar a algún lugar situado en la penumbra de la calle o que no les importa ir ateridos de frío.
Por eso mismo entiendo que en pleno agosto no nos digan la temperatura al sol, porque si hay días granadinos de agosto que nos evaporamos a nuestros buenos cuarenta y pocos grados a la sombra, también es cierto que en invierno es mejor escuchar que hace diez grados al sol que dos a la sombra...si no nos queda otra que patear la calle por cualquier cuestión o necesidad.
Porque además creo que todo el mundo está al tanto, para decirlo de forma más moderna...porque creo que la ciudadanía está al tanto que nos meten doblada las temperaturas y las predicciones meteorológicas cada vez que al gremio de la hostelería le da gana, especialmente en vísperas de fiestas de guardar y viajar. Ojo, esto hay que entenderlo y es de una lógica aplastante. Si resulta que en vísperas de Semana Santa por ejemplo hay mucha gente que aspira ya a darse cuando no un bañito mediterráneo en Benidorn al menos un paseíto al sol playero...si ya nos están diciendo que nos vamos a mojar a base de bien, igual se cancelan reservas a diestro y siniestro. Ya tienes a tres cuartas partes de costa levantina diciendo que a ver...para qué carajo hay que decir que va a llover que nos joden el invento hotelero. Mejor no profundizar en el tema.
Misma historia en época de frío, porque en este puente de constitución-inmaculada había ya estaciones para esquiadores abiertas pero ni predicciones de nieve ni estado de las pistas en los telediarios, no vaya a ser que mosqueemos a alguna estación con menos nieve que otra.
Hay que reconocer que con todas estas historias el oficio de meteorólogo está jodido o cuando menos difícil para granjearse a una inmensa mayoría. Siempre habrá a quien le cascará la predicción meteorológica y saldrá por peteneras. Que jodido está todo últimamente...nunca llueve a gusto de todos y visto lo visto tampoco se predica la predicción de lluvia a gusto de todos.
Desde luego todo esto es más interesante que cómo le ha quedado a la Esteban la operación de nariz y bolsas de ojos, lo cual no quita que uno también esté intrigado con la individua esta. En fin todo eso mejor que coger a un amigo y meterle aire comprimido por el mismísimo ojete del culete. Ya...una barbaridad pero si leen este enlace de noticia verán que es cierto. A unos chavales -muy juiciosos desde luego- no se les ha pasado por eso que tengan por cabeza mejor forma de pasar el rato, divertirse y gastar un bromazo que trincar a un pobre chaval "amigo" y meterle la goma del aire de las ruedas de los coches en un taller por el anteriormente citado ojete. A resultas de esta insuflación al pobre chaval le han reventado los intestinos, el bazo, el riñón y no sé qué más. Coño con los chavales. Yo no sé si esto es culpa de la educación, de los padres, de internet, de los videojuegos o de estar muy aburridos y tener mucho tiempo para pensar estas acciones. O básicamente son tan simples que no dan para pensar en las consecuencias.
Poco más, me retiro a las sombras del blog para ver el reflejo de este post.
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