martes, octubre 03, 2006

Paquetes perdidos.

Y no me refiero a los paquetes perdidos de los protocolos de información en los que se basa el “http”, ¿qué bien me ha quedado verdad? Estoy hablando del fantástico y oscuro mundo de la paquetería, ya saben, agencias de transportes y esas cosas.

Por mi trabajo, tengo una relación bastante estrecha con este mundo, más enfocada a la vertiente de recibir material o mercancía que a la de enviarla. Todo aquello que gira entorno a este mundo es muy curioso y sin llegar a ser los Episodios Nacionales de Galdós, dan para mucho.

Pero resulta que hoy les cuento sobre los paquetes perdidos. Una anécdota, tan real como la vida misma y doy fe que cierta hasta pasar por ella las aguas caldarias. Tan sencillo de explicar que comienza con una llamada que recibo de un proveedor nuestro de Castellón, concretando y sin dar nombres una fábrica de gres. Se ponen en contacto conmigo porque les ha llegado un paquete con remitente nuestro, lógicamente lo han abierto pensando en que les hemos mandado algo a “devolver” y resulta que el contenido del paquete son una especie de llaves.

El que nosotros devolvamos algo es normal, el que nosotros nos equivoquemos en la dirección de envío....pues también. Así pues mi primer pensamiento fue, a ver a qué compañero-tarugo se le despistó la neurona y confundió la dirección. Comprobado que ese error no existía continué con mi trabajo de investigación. Esta vez la búsqueda de culpables iba dirigida hacia la agencia en cuestión “portadora” del paquete. Una muchacha de timbre estupendo me jura y perjura que ellos no saben nada, que si el paquete ha llegado allí será porque hemos puesto esa dirección y en definitiva que los facinerosos, inútiles y poco eficientes somos nosotros y como siempre....a ellos les toca pagar los platos rotos.

Por desgracia la muchacha de dulce timbre de voz, que no de dulce contenido conversacional me pilló en un “renuncio” y olvidé preguntarle su nombre, ya sabrán más tarde por qué. Así que presto y dispuesto hablo con la gente de la fábrica de Castellón y les digo que hagan el favor de cuando tengan que enviarnos algo, de camino nos manden la caja misteriosa, así ellos se quitan un trasto de en medio y yo me puedo convertir en Alfred Hitchcock y los tres investigadores y el misterio de la jodida caja de llaves. Hoy ha llegado el gran día de recibir la caja y tomando menos cuidado que los de CSI, todo hay que decirlo, he destrozado una parte de la caja para ver su contenido. Cierto es que contenía llaves, bueno.... a mi en principio y por similitudes me han parecido bielas de motor, luego inspeccionando la caja he descubierto que son llaves tipo C -algo así- para cristales.

Pero ojo, no son llaves, resulta que son una especie de sujeta fachadas de cristal y encima iban para Bilbao, desde Granada a Bilbao. Todo esto lo que deducido, primero por leerme en mi juventud todos los libros de Alfred Hitchcock y los Tres investigadores y también por mi adoración por el Sr. Holmes. Y es que he podido ver un trozo de etiqueta, porque yo no he visto más etiquetas superpuestas en una caja en mi vida, que contenía un trozo de dirección y parte de un teléfono de una empresa granadina, así que por aquello de ser lugareños como yo he dirigido mi investigación por ahí.

Si, ellos fueron los que mandaron originariamente la caja, ellos fueron los que perdieron toda esperanza de recuperarla y hasta ellos se creían que yo estaba de coña cuando los he llamado preguntándoles si esa caja y su contenido les pertenecía. Por cierto que se han puesto muy contentos cuando se han enterado de la aparición de la caja pródiga.

Así que estoy contento, he hecho la buena acción del día. MI parte buena está henchida de felicidad, pero mi parte mala no está contenta del todo, porque si llego a quedarme con la muchacha del dulce timbre de voz pero asquerosa conversación hubiera realizado una venganza siciliana con ella. No es que me sienta derrotado ni mucho menos, porque como parte de mi terapia anti estrés mañana tienen cumplido juramento que me despacharé a gusto con los de la agencia, que por cierto es muy famosa, ya que y voto a bríos si salimos nosotros como remitente del paquete, no sale como destinatario donde apareció. Si contiene la caja pegatinas de delegaciones de agencia de media España -creo que esta caja es la Labordeta de las cajas- y sobretodo....tenía que haber sido entregada en abril de este año que comenzamos a terminar y miren por donde a estas alturas de curso....ha vuelto o está a punto de hacerlo al lugar de procedencia.

Por cierto que el servicio llevaba en la pegatina el adjetivo de “exprés”.

Cierto.



 

No hay comentarios: