Día de la hispanidad...en domingo.

Por partes ha salido redondo, por lo menos la mañana. Me he levantado prudentemente sobre las diez y poco de la mañana, he visto el desfile de las fuerzas armadas, deslucido el desfile aereo por la lluvia, aunque eso si...bendita lluvia. Y bien, una buena ración de tanques, vehículos de transporte, zapadores...etc. Muy bien en suma, y después y aún conociendo ya el carrerón de Alonso en Fuji, Japón, pues me he marcado el ver el buen hacer del asturiano con el Renault, lo malo de Massa conduciendo y lo cortito de tranquilidad y estabilidad emocional que está el negrito de Hamilton. Así es que prefiero que gane Kubica que me parece además un buen tipo.

Así que todo bien, por supuesto a la mañana dominguera hay que añadirle mi salida matutina a por el periódico y el pan. Por la tarde y aprovechando la apertura del comercio en domingo he comprado una mesa para la TV chica que tengo que montar mañana. Así que también ya tengo cubierta la mañana del lunes festivo y después he ido al cine a ver "Quemar después de leer" de los hermanos Cohen, con Clooney, Pitt y Malkovch haciendo un puntazo de película, divertida, irónica, amena y un buen conjunto..en suma.

¿No voy mal verdad? A estas alturas en anteriores subidas al blog ya estaba largo rato despotricando sobre España, el mundo, la gente la ausencia de educación etc..y por supuesto sobre las cagadas de perro y sus putos amos. Pero no, nada, total para qué. Confieso que me veo derrotado. Y no porque hoy sea domingo por la noche. Que a fin de cuentas estos últimos diás semanales y el convencimiento oscuro de empezar a currar el lunes siempre hace que se me entristezca el ánimo y lo que salga del teclado casi siempre sea mierda, basura y mucha...mucha crítica.

Pero no, ya digo, estoy derrotado, no rendido, todavía no, aunque casi. Todo es to viene al caso por la semejante pifia primitiva que ha colocado el sr Rajoy al expresar sus verdaderos sentimientos sobre el desfile de las fuerzas armadas. No es que yo tuviera confianza ciega en Rajoy ni por supuesto jamás lo he visto como el gran estadista capacitado de sobra para sacar a nuestro país de esta crisis galopante que nos rodea, nos ataca y nos hunde. Desde luego que no, para mi que con salvar la situación de su comunidad de vecinos del bloque...sito de su domicilio, casi que también le sobra. Y vale, si, si no gusta mucho el tema militar debe ser un coñazo soberano ver la parada militar y encima estar viendo la cara de la gente después del magistral pufo vertido. Porque está claro que habrá escuchado más de un vocinazo pregonándole la pifia que metio sr Rajoy. Curiosamente, y aunque suena a conspiración, cuando en el telediario del mediodía de A3 y T5 han emitido los reportajes sobre el público que estaba viendo el desfile..."convenientemente" en las dos cadenas se le ha ido el sonido del reportaje, jejejej. Curiosidades en fin.

Y si joder, no tiene por qué gustarle el desfile a Rajoy, es lógico que prefiera estar con su mujer y sus hijos un domingo, pero usted lo que quiere es presidir y dirigir España, y eso no conoce de días, es una gran responsabilidad y un deber para el que dudo mucho que esté capacitado. Pero lo peor de esto es ver la calafate de Pepiño Blanco lamiéndose los belfos de placer con la carnaza que han puesto bajo su pico el PP por no decir más claramente "la hemos pifiado" y Rajoy por no decir, discúlpenme españoles...pero les he fallado.

Claro que todo eso es mucho pedir para esta mierda de clase política que tenemos merecidamente.